La avena tradicional, también conocida como avena de cocción lenta o avena cortada al acero, suele ser procesada mínimamente, manteniendo más de su textura y sabor natural. Requiere un tiempo de cocción más prolongado, generalmente entre 10 y 30 minutos, dependiendo del tipo específico (entera, cortada o laminada). Esta versión conserva una mayor cantidad de fibra y nutrientes debido a su menor procesamiento.
La avena tradicional es generalmente considerada más saludable en comparación con la avena instantánea. Esto se debe a varios factores:
- Menor procesamiento: La avena tradicional, que incluye avena cortada al acero y avena laminada, pasa por un menor procesamiento que la avena instántanea, conservando así una mayor cantidad de nutrientes y fibra. El menor procesamiento también implica que no se le añaden azúcares ni otros aditivos.
- Mayor contenido de fibra: Al mantener más de su estructura original, la avena tradicional suele tener un mayor contenido de fibra soluble, lo que es beneficioso para la salud cardiovascular y para mantener niveles estables de azúcar en la sangre.
- Menor índice glucémico: La avena tradicional descompone los carbohidratos más lentamente, lo que ayuda a prevenir picos rápidos en los niveles de azúcar en la sangre. Esto es especialmente beneficioso para personas con diabetes o que buscan gestionar su peso.
- Menos aditivos: La avena instantánea a menudo contiene aditivos y azúcares añadidos, especialmente en las versiones saborizadas, lo que puede reducir su perfil nutricional. Estas adiciones pueden contribuir a un mayor consumo de calorías y azúcares innecesarios.
- Mejora de la salud cardiovascular
- Control del azúcar en la sangre
- Promueve la saciedad y ayuda en la pérdida de peso
- Mejora la digestión
- Propiedades antioxidantes
- Beneficios para la piel
- Fuente de nutrientes esenciales